Sunday, July 16, 2006

DTA se pone los cortos.

Partido “amistoso”.

La murga este año esta apostando fuertemente al rubro puesta en escena. Es así que con la finalidad de agilizar esos movimientos escénicos, los integrantes masculinos de la murga han comenzado a realizar los tradicionales “picaditos” (vale la aclaración, sobre todo para las chicas lectoras del blog, no es que los hombres de la murga se junten a comer quesito con salamín y aceitunas, sino que lo que están haciendo es “jugar” al fútbol).

Cuando se organizó el primero de estos matches, nos vimos ante la disyuntiva de formar los equipos. Por suerte la murga cuenta con el señor Martín “te organizó todo” Davison, el cual se preparó (cualsifuera un bolillero) una bolsita llena de papelitos con los nombres de todos los jugadores. Des está manera, antes de comenzar el partido se realizó el sorteo para saber como estarían constituidos los cuadros. Este hecho dejó en evidencia la baja moral de dicho compañero ya que los papelitos estaban cargados lo que hizo que evidentemente salieran dos cuadros totalmente desequilibrados (y no hablo mentalmente, sino en volumen de juego), de los cuales obviamente el señor Davison integraba el más poderoso.

Los cuadros fueron, por un lado: Martín “Chanchullo” Davison , Mauricio "Palermo" Ferrati, Diego “petaca” Sanguinetti, Santiago “la agarro o no la agarro” De los Reyes y Nacho “Trinidad y Tobago” Márquez, y por el otro: Danielito “voy a la larga” Araujo, Daniel “hachazo” Blanco los hermanos Caceres y alternaron: Soledad "Codito" Volonterio, Pablo “sin garra” (desgarrado) y el Amigo del Gordo, quien tuvo un pasaje fugaz por esta agrupación carnavalesca (un ensayo).

Como era de esperar los goles del equipo primeramente mencionado llegaron rápidamente y en gran cantidad. El resultado exacto del partido no lo tengo pero digamos que fue un decoroso 18 a 6. A la vista de dicho resultado para los partidos siguientes se realizaron cuadros parejos, los cuales se detallarán próximamente.

A modo de conclusión, la verdad que como murguistas somos malos jugadores de fútbol.